Alta voluntaria

Ayer navegué con un kayak hinchable por el Río de Aljaraque y hoy espero repetir. Me quedan sólo horas para reincorporarme al trabajo después de casi cuatro meses de baja, y dos semanas de vacaciones. El pie ya funciona bien, aunque con dos pegas: siguen las molestias y falta movilidad; no obstante puedo conducir y hacer vida normal, es una buena noticia.

Este tiempo me ha servido para disfrutar mucho del niño, de toda mi familia. El tiempo no se recupera, pero casi da la sensación de haberlo hecho con mi hijo, del que echaré de menos verlo despertar cada mañana. Volvemos a la asquerosa jornada partida, a la negación del concilio trabajo-familia, volvemos a la erosión de la realidad. Debería estar encantado, pero no me encanta trabajar. Me encanta obtener renta mínima para disfrutar el tiempo con los míos, con lo mío, y el precio para ello es demasiado alto.

Pero no es momento para lamentos; voy a recordar los cuidados de mi mujer, incansable y cariñosa, todo lo que ha peleado porque la estructura familiar siga intacta aún suponiendo un lastre su mayor apoyo; tendré presente las sonrisas de mi hijo y ese modo de mirar apenado la escayola de mi pie; respiraré la felicidad de sentirme querido por tanta gente, y me centraré en aprovechar cada minuto de las horas que tiene el día. Falta me va a hacer porque además tengo que estudiar en los ratos libres y tanta obligación hará que el blog se termine resintiendo. De momento tengo algunas cosillas preparadas, pero no tardaré en disminuir la marcha de mi actividad fotográfica, y espero que lo comprendan. A cambio prometo ir siempre "armado" con la cámara a mano.

Si la vida son etapas, creo estar empezando otra. ¡Allá vamos!

6 comentarios:

Ripley dijo...

me alegra mucho Andres que el pie vaya mejor y que vuelvas a trabajar aun a costa de sacrificar el tiempo para tu hermosa familia, eso es una familia, que te cuiden y mimen cuando lo necesites y hacer lo propio para con los demas si hace falta. olvida un poco el blog, centrate en esas oposiciones que te permitirian huir de la jornada partida, algo que en nuestro entorno solo ocurre en España siendo imposible conciliar una vida laboral y familiar logica.
que atrevimiento lo del kayak.
bueno amigo mio, un fuerte abrazo para todos.

Unknown dijo...

Seguir siempre es positivo. Además no olvides que cuando uno vuele a caminar puede volver a buscar nuevas posibilidades.
¡Animo!
Un abrazo

Luis Calle dijo...

ya sabes:... no hay mal que por bien no venga.
disfrutaste de la familia a cambio de estar de baja, y que te quiten lo bailao.
Suerte de nuevo.

Esteve Gallardo dijo...

al mal tiempo, buenas fotos!!!!
en serio, cuídate.
un abrazo

Anónimo dijo...

Magistral, Andrés. Que disfrutes el veranito y nos muestres muchas otras obras como ésta. Saludos.

Osselin dijo...

Tienes trabajo. Piensa en ello.