Señores de la casa Canon:

En agosto de 2008 compré una réflex Canon de gama semiprofesional (según comentarios del amabilísimo vendedor). Yo prefiero llamarla simplemente una cámara de fotos, modelo EOS 450D con número de serie XXXXXXXXXX. Error 05 fue su único lunar, que el servicio técnico se encargó rápida y eficazmente de subsanar, pero sin compensación alguna por los dieciséis días que estuve separado de ella, como hacen con el recibo de la luz. Para su mejor conservación compré una bolsa específica también Canon, aunque ni tiene número de serie ni conozco su modelo. Es negra y muy mona, la verdad es que estoy contento con ella.

Así mismo, compré para re-iniciarme en la materia un objetivo zoom EF-S 18-55mm f3.5-5.6 IS, número de serie XXXXXXXXXX, el cual sufrió la repentina avería del motor de enfoque y el sistema de estabilización de imagen justo un mes después de agotada la garantía. Esta casualidad me atormentó lo suyo, pues padezco una minusvalía sensorial en la vista, que unida a la incipiente miopía me limita a la hora de enfocar. Dejé de usarlo por esto, pues el servicio técnico me presupuestó un valor casi idéntico al de la adquisición de uno nuevo. Qué paradoja (¡!).

Para obturaciones un poco más largas de lo que la cámara presta ella sola, compré también un cable disparador Canon RS60-E3 con UPC CODE XXXXXXXXXXXX, el cual va fantásticamente. Incapaz de asumir una cámara con cable disparador sin objetivos para hacer las fotos, compré el EF 50mm f1.8 Mk II, número de serie XXXXXXXX y con el que hago el 99% de mis fotos. Todo sea dicho, qué buen objetivo éste y qué buena relación calidad-precio.

Pero sabemos que el proceso fotográfico se consuma cuando todo está acabado en papel, y para ello compré una vez más un producto de “la casa”. Se trata de una Canon Selphy CP 740 con los siguientes datos en el código de barras (no consigo ver número de serie por ningún lado) XX XXXXXXXXXX. Después de mucho investigar he podido comprobar que hay dos opciones para un buen uso: imprimir directamente de la cámara y sacrificar los ajustes realizables al formato Raw (¿no era semiprofesional?), o acudir a una empresa que diseñe un perfil específico para la impresora, porque haciéndolo desde el ordenador resulta que el verde no es verde, ni el rojo es rojo. Ni lo uno ni lo otro me parecen apropiadas salidas para una impresora a la que la empresa responsabiliza de una “impresión de fotografías de alta calidad asequible” (esta frase está en su web oficial).

No obstante, soy feliz porque tengo una impresora, y una vez he conseguido por mi cuenta un perfil de color apropiado y he gastado los cinco papeles imprimibles que ponen por cortesía en el embalaje de la máquina, compro a primeros de año por 42´42 € un Paper Set KP-108N, que según especifica la caja está fabricado el 1 de noviembre de 2.010, y tiene un UPC CODE XXXXXXXXXXXX. Cabe destacar que a pesar de que pago el papel, éste trae repetidas marcas de agua con publicidad de la casa, pero eso es lo de menos. En dicho set se incluyen 108 papeles brillo de alta calidad con tres cartuchos que hubiera disfrutado felizmente de no ser porque el segundo de ellos se enganchara en no sé qué apéndice del interior de la impresora dejando huérfanas de tinta a las 36 brillantes hojas correspondientes. No recuerdo bien los metros de plástico semitransparente que salieron de la carcasa, que milagrosamente no estropearon también la Selphy. Ahora ya sé qué es eso de impresión por sublimación, pues sin duda fue sublime la experiencia.

Pero no nos engañemos, un usuario de cámara de objetivos intercambiables que ya ha desembolsado un mínimo de dinero en lentes de “la casa” que no se pueden usar con otras marcas es, sin duda, un cliente potencial, casi esclavo teniendo en cuenta la caída del poder adquisitivo general y la fuerte devaluación de los productos usados. Quizás poco importe ya al servicio postventa mi caso y tal vez ni me contesten pero ¿Qué hago yo ahora con las 36 hojas de papel brillo de alta calidad que no tienen su merecida tinta? Cartuchos sueltos no venden, y buscar a alguien que haya sufrido el robo o pérdida de 36 hojas de papel brillo de alta calidad al que le sobre un cartucho de tinta se me antoja harto complicado, mucho más que comprar otro set ¿Es eso lo que quieren? A ustedes ¿Qué les parece?


Sin otro particular, reciban un afectuoso saludo.


Andrés Rite.
Indignado con “la casa”.

8 comentarios:

Angel Corrochano dijo...

La verdad es que es una experiencia bastante frustrante.
Las marcas crean esclavos tecnológicos y es complejo, una vez que caes en las redes de una de ellas, poder escapar sin sacrificar tiempo e inversión. Y nos cuesta mucho ahorrar para permitirnos mantener esta afición.
Yo, tocaré madera, he tenido bastante suerte con lo que he ido comprando. Incluso mi actual cámara, una Nikon D200, la compré de segunda mano por eBay y ya llevo 4 años con ella y sin problemas. En cuanto a las ópticas, la verdad es que he ido adquiriendo, poco a poco, ópticas de calidad y últimamente objetivos antiguos, el último un 28 f/2,8 manual, por ebay, en bastante buen estado y a un muy buen precio.
De Nikon nunca he esperado gran cosa, salvo que sus trastos funcionen sin problemas, eso, naturalmente, es exigible. Incluso el servicio técnico de la marca es bastante lamentable, y los tiempos de espera son memorables.
Yo con el tema de la impresión nunca me he decidido ha comprar nada serio, tengo una hp de esas para imprimir de todo y no me preocupo demasiado de su calidad. Cuando saco copias (tengo las paredes de casa llenas de fotografías) las dejo en manos de un laboratorio profesional que suelen darme bastante calidad y seguridad, y siempre puedes discutir con ellos algún aspecto concreto del acabado, incluso creo que sala más barato que imprimir uno mismo.

Ánimo Andrés, es un mal del cual es difícil escapar.

Un abrazo

ercanito dijo...

A mi no me desanima esta gente. Me da lo mismo Canon que Nikon o Pentax porque lo que hago me sobra con lo que tengo.

He ido comprando con mi modesta economía un equipo medio con buena relación calidad precio y me veo limitado muy pocas veces. Sé que no me van a regalar un cartucho, pero como consumidores todos tenemos que exigir un mínimo de respeto. Lo cortés no quita lo valiente.

Nano dijo...

je, je, je... que conste que no me río del mal ajeno sino del tono irónico de tu narración... ¡ánimo!

Un saludo

JCG dijo...

Te han contestado?

ercanito dijo...

Calculo que hoy les habrá llegado la carta.

diminuto blog dijo...

Hace años tuve problemas con Nikon. Fueron tantos y tan escandalosos que me prometí no volver a comprar ninguno de sus productos.

Años después, y aunque no olvidé el incidente, quise dar una oportunidad más.

Y la cagué.

Marcos Muñoz dijo...

Andrés yo tengo una 400, una 550 y un puñado de objetivo y estoy encantado. Siento mucho lo que te ha pasado, pero no eres el primero con el error 05, aquí a un amigo se lo quitaron en una tienducha de barrio y le dijeron que era por culpa de flash. No lo sé, pero funciona.
Animo y por lo que a mí respecta en impresión te recomendaria Epson Stylus Photo, son inigualables.
Un abrazo.

Isabel Soriano dijo...

Hola Andrés. He caído en tu blog por casualidad y con tu permiso me quedo y te sigo.
Lo que te ha sucedido es de libro. Mira que es mala pata que te surjan problemas con todo.
Yo tengo una canon 400D y también tuve problemas de estabilizador de imagen del objetivo.
Suerte y nada más.
Saludos.